A finales de enero supe que en Telas Donnatela cumplían en abril su 33 aniversario y querían montar algún sarao para celebrarlo. No sé si conocéis esta tienda madrileña: es de las de toda la vida, con mucha variedad, aquellas que te venden tela y te regalan consejos y asesoramiento, Sonia y Cristina le ponen todo su cariño y se nota. Yo no he tenido todavía ocasión de visitarla pero lo tengo pendiente, las fotos de las telas que cuelgan en su cuenta de Instagram me tienen loquita.
Para celebrar el aniversario pensaron en organizar un reto muy gracioso: se trataba de crear algo con 30 cm. de tela (que nos iban a mandar a todas igual). Este algo que no podía incorporar más tela que la recibida pero si productos de mercería. Han invitado a varias bloggeras y después también a 30 costureras que han recibido la misma tela que nosotras.
Con 30 cm. de tela se pueden hacer muchas cosas pero todas las que se me ocurrían me parecían muy obvias, demasiado fáciles… otras eran proyectos de esos «de quedar bien» y sabía que una vez hecha la foto no los iba a usar más. Así que estuve semanas con la tela encima de la mesa de costura dándole vueltas hasta que se encendió la bombilla.
Vi este vídeo tutorial del canal de Luluferris y lo tuve claro: iba a coser una nueva cinta para mi cámara. Hacía siglos que la quería renovar pero no sabía muy bien por donde empezar y había otros proyectos que corrían más prisa. No seguí el vídeo pero me ayudó un montón para orientarme. La diferencia principal es que he aprovechado la cinta y los pasadores que se ajustan a la cámara porque me parecen muy seguros y fiables. ¡No quería tener ningún susto! He empleado también cinta de mochila de algodón negra, guata y entretela.
Como podéis comprobar la cinta de cámara me representó gastar tan poca tela que pude hacerle una bolsa acolchada a juego. Para la bolsa además de la tela de flores usé guata y un cordón negro grueso.
Si os queréis hacer una cinta igual os recomiendo el vídeo que os comentaba arriba de Luluferris, aunque hay otros muchos tutoriales en la red que encontraréis escribiendo «cinta cámara» en youtube. La bolsa no tiene ningún secreto: es la típica bolsa de desayuno pero con una capa de buata en el interior para que la cámara quede protegida (la pegué a la tela interior con pegamento temporal y la cosí de la forma habitual).
No hice trampa y la tela interior es igual que la tela exterior. Además la gasté toda así que es un proyecto que no genera residuos. Está todo combinado con negro que me parece que hace destacar la tela de flores y además le da un toque moderno. La cámara es negra negra negra así que también ayuda a que se «integre» los complementos de la cámara con el aparato en si.
¡Estoy contenta! Ya puedo salir a sacar fotos con mi correa y funda de cámaras personalizadas.